SALVADOR CABAÑAS
El jugador paraguayo Salvador Cabañas viajó a Buenos Aires, donde será revisado para ver si es posible extraerle la bala alojada en la cabeza desde hace once meses, cuando fue tiroteado en un bar de la capital mexicana.
El ex goleador del América de México viajó con su esposa, María Alonso, y será examinado por Máximo Etchepareborda, del Laboratorio de Funciones Cerebrales Superiores de la capital argentina, informó a los medios el neurólogo personal de Cabañas, Celso Fretes.
"Si (Cabañas) va a seguir con la vida que lleva no es necesario (que se extraiga), pero de pronto para cabecear un balón y cosas así puede afectar, por eso evalúan la posibilidad de extraerle la bala", indicó Fretes.
El médico explicó que aunque el proyectil ya no ocasiona molestia alguna, la buena recuperación del jugador alienta la posibilidad de que pueda extraerse el proyectil, para que pueda volver a entrenar con algún equipo profesional paraguayo.
Cabañas llevó a cabo, en Buenos Aires, un proceso de rehabilitación de varias semanas, tras haber estado 37 días en un hospital de la capital mexicana, donde había sido operado. El delantero fue tiroteado en el baño de un bar de la capital mexicana la madrugada del 25 de enero pasado.
Los médicos entonces no le extrajeron el proyectil al considerar que tendría mayores posibilidades de supervivencia, pero dijeron que los daños neurológicos podían perdurar. Cabañas mantiene un litigio con el América por la rescisión unilateral de su contrato y la pérdida de otros beneficios. También demandó a su ex representante, el paraguayo José María González, por presunta estafa y lesión de confianza.